Transparencias en los dientes, causas y tratamiento

Transparencias en los dientes, causas y tratamiento

Hay ocasiones en las que el esmalte dental se ve desgastado y erosionado, dando lugar a lo que conocemos como «dientes transparentes». Las causas pueden ser diversas y su tratamiento dependerá de su origen y gravedad.

¿Qué puede causar transparencias en los dientes?

El desgaste del esmalte, sobre todo en los extremos de los dientes, es hasta cierto punto normal. Pero si empieza a incrementarse y nuestra sensibilidad dental también (señal de que la dentina puede estar al descubierto), debemos ponerle remedio cuanto antes.

Las causas pueden ser distintas: malos hábitos alimenticios (ingiriendo demasiados azúcares, bebidas ácidas y refrescos carbonatados por ejemplo), bruxismo, enfermedades gastrointestinales, malos hábitos de higiene bucodental (por exceso con cepillos demasiado duros, o por defecto por ser poco habitual), tabaquismo, consumo habitual de alcohol, consumo de drogas, roce de los dientes al masticar, abuso de blanqueadores dentales «caseros»…

En definitiva la causa principal es la baja mineralización del esmalte dental. Lo principal es dar con la causa que origina el problema y plantearse nuevos hábitos.

¿Cómo podemos solucionarlo?

Dependiendo de la causa que origina el desgaste del esmalte o su baja mineralización, el abordaje será distinto. En el caso de que se origine por bruxismo, lo recomendable es reducir el nivel de estrés del paciente y a menudo es necesario el uso de una férula de uso nocturno. Si se detecta una dieta inadecuada, lo ideal es cambiarla y eliminar los ácidos que desgastan el esmalte. Si el descaste es muy severo, probablemente haya que colocar unas fundas a las piezas dañadas. Todo depende de cada caso y es imprescindible acudir a consulta.

Es conveniente considerar nuevos hábitos: tras comer alimentos muy ácidos no cepillarse enseguida, es mejor esperar cerca de 1 hora, pues esto permitirá que la saliva neutralice el ácido y proteja los dientes. Consumir al final de las comidas un vaso de leche o un trozo de queso porque contrarrestan el ácido presente en la boca después de comer. Mascar un chicle sin azúcares que estimule la producción de saliva, para anular los ácidos producidos al terminar las comidas. Cepillar los dientes 3 veces al día con un cepillo de cerdas suaves y empleando siempre una pasta dental para dientes sensibles enriquecida con flúor (consultando este punto con el dentista).

Pero, sin duda, lo más importante es acudir a la consulta de un odontólogo/a para que encuentre la condición primaria que produce la erosión y así combatirla. En Clínica Dental Irazabal estaremos encantados/as de atenderte. Contáctanos y consúltanos tu caso.